12 de julio de 2009

MÁS ALLÁ DEL MOSTRADOR

Muy bien… en mi entrada antepasada ya había hablado sobre la Mercadotecnia y cuál es su función, hablando muy idealistamente.
Como me comentaba mi estimadísima blogger friend Mar (y esto es algo que pasa en todos lados), comúnmente se confunde Ventas y Mercadotecnia. Cuando realmente, en las empresas grandes, son dos departamentos que están en constantes riñas. ¿Cómo lo sé? Mi padre tiene más de 25 años trabajando en ventas y yo soy Lic. en Mercadotecnia.
Ventas y Mercadotecnia son muy diferentes, sin embargo ningún departamento puede existir sin el otro. Mercadotecnia está enfocado a Ventas y Ventas necesita de la Mercadotecnia para lograr su fin.
Pero hoy no pienso aburrir a mi escaso y fiel público hablando sobre mi divertida y excitante carrera o el mundo de los negocios, sino que emplearé la visión del cliente.

MÁS ALLÁ DEL MOSTRADOR: La cadena del mal humor.
(inserte aquí música muy a la Twilight Zone)

Muchas personas, sin importar su carrera universitaria, trabajarán en algún puesto de ventas, telemarketing, de meseros u otro lugar donde tengan que atender al público. Y la mayoría de ellos no gustarán de ese trabajo, ya que están ahí sólo por el sueldo.
Trabajar en algo que no consideramos “importante” sólo por un “sueldo”, puede llegar a amargarnos muchísimo y convertirnos en el cliente que no deseamos tener. Una pequeña cadenita de reacciones que irá desde el puesto más alto hasta el más bajo. Vamos, todos disfrutamos desquitarnos con aquel que está más abajo que nosotros. Sobre todo si éste no puede defenderse.

El pobre vendedor de tarjetas de crédito que está en el centro comercial anda enojadísimo porque no pudo hacer una sola venta hoy y hasta le dijeron que es “molesto”. Así que , para tranquilizarse, va en la noche a cenar a un restaurant y resulta que, para acabarla de amolar, le pusieron cebolla cuando pidió estrictamente que no lo hicieran. Entonces, en lugar de hablarle al mesero amablemente y decirle de manera tranquila: “oye, disculpa…. Pero te lo pedí sin cebolla”, lo que hace es hablarle de forma que tooooda la gente del restaurant se entere de lo ineptos que son, que no pueden tomar una simple orden, qué falta de interés, bla bla bla.
Entonces, el pobre mesero, acepta todos los insultos y va a la cocina…. Pero, apenas cruza la puerta, se le cambia el semblante y se desquita con todos los que pudieron haber tenido la culpa. “Son una bola de inútiles, qué no saben leer??? SIN CEBOLLA!!!”. Ahora el cocinero avienta todo, empieza a cocinar otra orden igual, pero SIN CEBOLLA, y le grita al mozo de la limpieza: “órale, muévete!!! Cómo crees que voy a trabajar con todo esto aquí acumulado? Por eso se mezclan los pedidos, no hay orden aquí!!! Acaso soy el único que trabaja?”. Ahora el culpable es el mozo… y no sólo de volver a hacer el platillo, sino de los insultos al mesero y hasta de las tarjetas que no se vendieron.
En la noche, el mozo llega a su casa y alguien ocupó su lugar de estacionamiento. Donde él ponía su vochito, resulta que está el Accord del vecino ocupando mitad de su espacio. Así que, enojado como ya estaba, se mete a la fuerza, se sube con todo y carro a la banqueta y tumba los botes de basura del vecino, ensuciando toda la entrada de la casa.
Habiéndose desquitado, se va a dormir tranquilo a las 3 am. Pero a las 6 am, sale su vecino y ve todo el desorden; por tener que recoger todo eso, lo atrapó el tráfico, llega tarde a su trabajo, tiene que estacionarse más lejos, lo regaña el jefe y todo es un fiasco. Ahora es tiempo de desquitarse con la secretaria. ¡Cuánta inutilidad! ¡Esos papeles deberían estar listos antes de que él llegara! Quién sabe por qué no la ha despedido, es una inútil.
Son las 2:00, hora de la comida, y la secretaria tiene tanto trabajo de su maldito jefe gruñón, que no puede salir. Sólo tiene una hora y resulta que pudo zafarse hasta las 2:30. Corre hacia el centro comercial y en el camino al KFC, la detiene un joven:
- Señorita, buenas tardes, cuenta usted con la nueva tarjeta ….?
- ¿Qué no ves que traigo prisa? ¡Ch*?!$gado! Si quisiera una tarjeta, iría yo misma a sacarla al banco!!!!


¿Cuántas veces hemos sido el inicio de esas cadenitas? ¿Cuántas veces hemos sido un simple eslabón? MUCHAS. Pero, ¿Cuántas veces nos hemos atrevido a detenerlo?

Nunca he trabajado en ventas y, vaya, he rechazado muchas ofertas de esos empleos. Sin embargo, entiendo perfectamente que no es fácil tratar con tanta gente. Decir “Buenos días, en que puedo servirle?” y que te contesten con una cara de que están oliendo excremento.......
El vendedor tiene que estar siempre sonriente, el vendedor tiene que dar siempre la razón al cliente; el vendedor debe ser educado, debe estar siempre feliz, es su deber atenderme correctamente, responder todas mis estúpidas dudas sin llamarme idiota, aguantar mi mal humor.

Yo, en lo personal, soy de las que saludo primero al vendedor: “buenas tardes, cómo está?”, hacer uno que otro chascarrillo tonto como: “si no pasa la registradora, es gratis, verdad?” o “me dijeron que aquí fían, es cierto?”… y terminar la transacción con un “gracias!, que tenga buen día!”... Han pensado que tal vez es el único vendedor que vean en todo el día, pero que ellos han tenido cientos de clientes en dos horas?

Ventas y Mercadotecnia NO son lo mismo.

El mercadólogo se jacta de sus estudios, de los libros, de conocer tales o cuales teorías, de saber aquí y allá; su creatividad, su genio. Y también de lo bien que se ve su trasero en esa silla frente a la computadora todo el día, mientras le da la espalda a su título universitario.
El vendedor no siempre requiere un título universitario (según el giro de la empresa), pero, a diferencia del mercadólogo, requiere de traer siempre los pantalones bien puestos y de nervios de acero.

Y si siguen creyendo que el vendedor no es importante, véanlo de esta manera: al cliente no le pagarán por tratar bien al vendedor, verdad? Pero la diferencia entre un buen día o encontrar a un perro muerto en la entrada de tu cochera, reside en decir: "gracias" y sonreír, aunque nos haya ido de la fregada.

Algo extremista, pero tiene bastante lógica si tienen una mente como la mía.

5 de julio de 2009

Bendita mercadotecnia

Soy Licenciada en Mercadotecnia. Mi área abarca desde el hermoso círculo de la Imagen, Identidad Corporativa, Publicidad, Diseño, Creatividad; pasando por Relaciones Públicas y Organización de Eventos; llegando hasta Administración, Contabilidad y Finanzas.

¿Qué hace la Mercadotecnia? Dicen que la Mercadotecnia es “El arte de vender”, sin embargo no por eso se traduce a ventas. ¿A qué se refiere entonces con “el arte de vender”?
El trabajo de mercadotecnia es precisamente el MERCADO. Todo gira alrededor del cliente: lo que quiere, lo que busca, lo que le gusta, lo que percibe. Puede empezar con 2 bases: con una necesidad o con un producto.

A veces ya se tiene el producto, entonces lo que hay que hacer es colocarlo. Buscar el público meta: los que te van a comprar y los que podrían comprarte. Después de eso, hay que averiguar cómo se llegará a ése público. Luego, hay que mantener a ése público interesado.
Por ejemplo: una nueva marca de artículos de arte. ¿Quiénes me comprarán? Los estudiantes de diseño gráfico y los artistas, a ellos voy orientada. ¿Quiénes podrían comprarme? Los estudiantes en general y personas a las que les gusta o se les ofrece de pronto hacer ilustraciones, etc.
¿Es mi producto algo lujoso? ¿Es muy especializado? ¿Es sencillo, barato? ¿Qué espera el cliente de éste producto? ¿Cada cuando necesitará comprarlo? ¿Qué gama de productos puedo ofrecer para satisfacer ésta rama comercial?

Otras veces se busca una necesidad. ¿Qué público tengo? ¿Qué necesitan? ¿Qué se les antoja?
Por ejemplo: analizando una pequeña comunidad, una colonia popular. Tal vez la gente no tiene suficiente dinero para comprar y mantener una computadora. Pero necesitan ese nexo con la tecnología; sea por escuela, entretenimiento, trabajo o mantener comunicación. Entonces ahí tenemos la respuesta: un ciber-café.
¿Cuánta gente vive en mi comunidad? ¿Cuántos de ellos carecen de computadora? ¿Cuántos de ellos necesitarán más el uso de computadora? Así puedo saber cuántos ordenadores necesito. ¿Qué tipo de programas necesitarán? ¿Básicos, avanzados? ¿Es necesario bloquear ciertas páginas de internet? ¿A qué horas necesitan más las computadoras? ¿Qué otros servicios puedo ofrecer? ¿Impresión, scanner, quema de CD’s y DVD’s? ¿Cuánto pueden pagar? ¿Qué tipo de instalaciones necesito? ¿La gente vive muy cerca, necesitaré poner un baño? ¿Cuántos negocios de ciber-café hay cerca?

Para tener éxito, hay que estar enfocado al mercado. Debemos entender que, a veces, hay que romper un poco las reglas y los valores sociales para poder mantenernos; para proteger un estándar.
Hay lugares en los que se debe ser amables y nunca hacer discriminaciones, lo cual vendría siendo lo ideal. Sin embargo, hay otros lugares en los cuales no se puede aceptar a cierta clientela… por más feo e incorrecto que suene.

A la Nissan no le importará que vaya alguien de clase media-baja o alguien de clase alta, siempre y cuando puedan pagar el automóvil. Pero en Aston-Martin sólo atenderán a quien tenga 2 millones de pesos (mínimo) para comprarse un auto; si les ven entrar con facha de clase media, los correrán del lugar muy elegantemente.
¿Por qué? No se trata de simple elitismo del dueño de la agencia, sino de los clientes. Debemos entender que, mientras el pobre puede voltear para arriba cuando sea, el rico no gusta de voltear para abajo. Así que, en el momento que vea a un “miembro de la prole” entrar a una agencia de Aston Martin y que lo atiendan excelentemente, éste se sentirá ofendido… como si lo estuviesen poniendo al nivel de una persona de recursos económicos limitados. No es lo correcto, pero así es la gente… y es a la gente a la que le vendemos.

Sí. La mercadotecnia no es otra cosa que psicología. Se trata de analizar a las personas para mantener a todos felices, no tanto de lavar cerebros.
A veces puede ser algo muy bonito, a veces puede ser algo muy feo. ¿Pero saben qué? ¡Funciona! Las empresas podrán sobrevivir sin departamento de mercadotecnia, pero JAMÁS podrán sobrevivir sin la mercadotecnia en sí.

Todos los días estamos expuestos a cientos de miles de millones de estrategias de mercadotecnia. Desde la ropa que traemos, el celular, la cartera, el llavero, el maquillaje, el auto, la música que escuchamos, el refresco que nos compramos. Todo, absolutamente todo, está ligado muy directamente a la mercadotecnia. Pero el truco es precisamente que no nos demos cuenta.

Porque hasta cuando dices: “eso es pura mercadotecnia, mejor me compro esto otro…”, ten por seguro que un mercadólogo ya lo tenía planeado ;)

8 de junio de 2009

El IQ

La inteligencia se adquiere, se hereda, se crea o se destruye?


Hace algún tiempo platicaba con persona X sobre un test de I. Q. que había tomado; estaba muy emocionada porque subí 1 punto en 6 años. Ésta persona se mostró algo indiferente y luego hizo una burla sobre lo estúpido que era eso del "I.Q.".
A pesar de que X es una persona claramente mediocre e ignorante, por alguna razón me animé a la discusión del tema.

X alegaba que el IQ es irrelevante, que no tiene un verdadero significado y que no se puede juzgar a alguien por ello. Y en cierto punto tiene razón, sin embargo su punto de vista en extremo Hippie-Mediocre-Humanista, no es tan correcto.

Es verdad, el IQ no define qué tan inteligente es una persona. Para eso, tenemos qué saber lo que significa: Coeficiente Intelectual. Esto nos habla de la habilidad cerebral de una persona, no de su cultura, valores, ideas, etc.

Muchas veces confundimos la inteligencia con la cultura. ¿Recuerdan cuando decían que el nerd del salón era muy inteligente? ¿Y que el niño hiperactivo era un burro? Probablemente el nerd sacaba buenas calificaciones dado a su grado de concentración y capacidad de memorizar, sin embargo su lógica era bastante pobre. Y el niño hiperactivo probablemente era así por que la enorme capacidad de su cerebro le impedía concentrarse sólo en una cosa a la vez.

Una persona culta puede ser inteligente o un completo imbécil que conoce mucho. ¿Cómo lo sabemos? Fácil. Un "culto idiota" leerá libros, verá el Discovery Channel, las noticias y cuanta cosa... y te hablará de ello tal y cual lo vio. Un "culto inteligente", al contrario, tomará información de distintas fuentes y, tras investigación y criterio, llegará a sus propias conclusiones (sin necesidad de citar siempre a tal o cual autor, periodista, etc).

En fin, el IQ nada tiene que ver con cultura. El IQ nos habla de capacidad, no de inteligencia real.
Es decir, nuestro cerebro es como un contenedor y la inteligencia es el líquido con el que se puede llenar. El IQ nos dice cuánta información le cabe al cerebro de cada quién y con qué facilidad puede ser procesada. Hay gente que tiene una gran capacidad y otra que no la tiene. Sin embargo no se trata de tener mucha o poca, sino de explotarla.
Le dije a X: una persona podrá tener 110 de IQ y otra podrá tener 98. Y probablemente la persona de 98 será más inteligente. Si tienes espacio para 110 y lo llenas sólo con 85, no te sirve de mucho.

Es una mentira eso de que todos tenemos las mismas capacidades. NO ES CIERTO. Todos tenemos capacidades únicas. Recordemos que existen 8 (o más..) tipos de inteligencia: lingüística, lógica-matemática, espacial, musical, corporal-cinestésica, intrapersonal, interpersonal y naturalista.
Hay quienes tienen un poco de todas, así como hay quienes tienen sólo 4. Alguien podrá ser muy inteligente en matemáticas, pero una papa para la comunicación.
Lo que sí es cierto es que todos podemos desarrollar esas inteligencias.

Factores como la sociedad, la familia, la cultura, los valores, la posición económica y la raza nos hacen desarrollar cierto tipo de inteligencias... y, aunque se nieguen a aceptarlo, la raza determina la capacidad. Por ejemplo: un japonés tiene más capacidad cerebral que un etíope, sin embargo el etíope tiene más capacidad físico-motora. Pero igual, un japonés podrá ganarle a un etíope en las olimpiadas, y otro etíope podría ganarle a un japonés en el ajedrez.

No. El IQ no te hace más o menos inteligente; sólo significa qué tan inteligente puedes llegar a ser.
No. Ser inteligente no significa saber muchas cosas, sino saber cómo emplearlas.
No. Un burro no necesariamente es el que reprueba siempre. La mayoría de los "Genios" suelen ser personas hiperactivas y con malas calificaciones, puesto que la escuela les aburre y la consideran un insulto a su inteligencia. Claro, no siempre es así, pero sí es normal.

Sí. La inteligencia se adquiere. Aunque Juanito Pérez no tenga inteligencia musical, existe un contenedor en su cerebro dedicado a esa habilidad. El que no tenga nada ahí dentro es otra cosa. Sin embargo, con dedicación y empeño puede desarrollar aunque sea un poco ésta área.
Sí. La inteligencia se hereda.
Sí. La inteligencia se crea.
Sí. La inteligencia se destruye. Si no me creen, vean La Escuelita de Jorge Ortíz de Pinedo y verán que sí es posible.

En fin, decir que una persona es o no 'inteligente' es realmente un mero modismo actual. Todos y cada uno de nosotros somos inteligentes aunque sea en 1 cosa.
Algunos son inteligentes en la cocina, otros resolviendo problemas caseros, otros en cuestiones de lógica y otros en temas matemáticos o sociales.

Jamás hay que juzgar la inteligencia de alguien sólo porque no tiene tal o cual grado de conocimientos en cultura general (eso no es inteligencia, sino ignorancia... y todos somos ignorantes). Tampoco si el niño reprueba constantemente en la escuela. Probablemente ese niño sea un futuro ingeniero o diseñador de interiores, pero nunca lo sabremos si lo obligamos a estudiar burdas materias de primaria que poco tienen que ver con su desarrollo personal y profesional.

Y el que no entiende de lo que hablé... pues qué burro.

26 de abril de 2009

[Si es niña, ponle mameluco rosa]




Desde que nacemos, estamos destinados a llevar una etiqueta según nuestro sexo. Hombre o mujer, no hay de otra. Desde ese preciso instante, o incluso mucho antes de nacer (bendita tecnología), ya se sabe si usaremos cobijita rosa o azul. Ya ni siquiera pantalones o falda.


Es bien sabido (aunque parece que las feministas no lo entienden) que la naturaleza nos da diferentes roles a todos los seres vivientes según el sexo. En la mayoría de los animales, las hembras son las encargadas del hogar, de cuidar a las crías y administrar los recursos; los machos son la fuerza bruta cuya principal aportación es la comida (o dinero), seguridad contra los depredadores y, claro está, espermatozoides.

Eso no significa que los machos no puedan administrar o cuidar a los bebés, ni que la mujer sea incapaz de conseguir comida y proteger la casa. Vean National Geographic, Discovery Channel, Animal planet, etc y verán a uno y mil animales que prueban este punto. Por ejemplo: los leones.

No, no digo que las mujeres sean mejores que los hombres. TAMPOCO.


Es natural para la mujer ser femenina, es natural para el hombre ser masculino. Es natural que lo femenino sea complicado y que lo masculino sea, no sencillo, sino SIMPLE. No es etiqueta, ES NATURALEZA.


¿Pero a qué me refería yo con la etiqueta del rosa o azul? Vamos pues… Recordemos que la raza humana no existe desde hace 2 mil y cacho de años. La raza Homo tiene más de 30’000 años caminando sobre la tierra, evolucionando y poblando el mundo.

Antes de la era cristiana, las mujeres eran consideradas iguales a los hombres en la mayoría de las culturas poderosas. Eran reinas, soberanas, importantes e inteligentes. Eran guerreras, eran diosas, magníficas; tanto implacables como dulces y maternales.


Pero desde hace más de 1’600 años, el emperador Constantino decidió que ser pagano era una aberración y que sólo hay un Dios. Se revolvieron y re-escribieron todos los textos de los evangelios y se inició una nueva era de machismo. Machismo que venía de la aberrante cultura judía, claro está.

Y Jesús no era así. Tanto que su mejor amiga-confidente (y probablemente esposa), era una mujer de gran inteligencia y gracia: María Magdalena. Esa joven hermosa y rica que se entregó en cuerpo y vida a su guía espiritual. Sólo a ella le confesó muchas cosas, le enseñó, le compartió. A una mujer.

Sin embargo, le llaman una prostituta en reforma. No porque vendiera su cuerpo por unas monedas, de lo cual no existe prueba alguna, sino por su libertad.


Gracias a todas las tergiversaciones que hay en la historia cristiana, es que las mujeres no pueden aspirar a algo más que ser una monja. Es la palabra de Dios.

Claro que su Dios no escribió la Biblia… tampoco Jesús. Probablemente los libros no fueron redactados por dichos apóstoles y, los que sí fueron escritos por ellos, ya no tienen mucho de la idea original. Recordando también que los originales de por sí ya se contradecían entre ellos, y en todos se manifestaban claramente los sentimientos de envidia hacia la relación de María Magdalena con el Mesías. Por lo cual se ha denigrado tanto la imagen de esa mujer.


Ahora es todo un logro que una mujer sea presidente o dueña de una gran compañía. ¡Es algo increíble! No porque sean ‘naturalmente’ incapaces, sino porque su rol ha sido reprimido; y no nada más por el hombre, sino por la mujer misma; la fémina quien, en su ferviente fe hacia una deidad, asume el papel sumiso impuesto desde antes de la era medieval por sacerdotes corruptos.


La mujer es más fuerte emocionalmente que el hombre, y claro está que es capaz de soportar más dolor físico. Sin embargo, su complicada mente y su tierno y materno corazón, le hacen doblar las manos ante un hombre que le habla con seguridad.



No, no soy feminista… de hecho el feminismo me parece una completa estupdidez.

No, no soy cristiana. Me resulta imposible creer en una deidad.

Soy una fémina que está un tanto inconforme por el rol que la mujer debe desempeñar en nuestra sociedad. ¿Liberación femenina? Mis polainas! Libres hemos sido siempre. Siempre hemos sabido cómo piensan los hombres y tenemos toda la capacidad de manipularlos a nuestro gusto.

Soy una niña que nació en una familia católica; que fue bautizada e hizo la primera comunión para darle gusto a sus padres… y que, aunque no es mi obligación hacer los ‘deberes propios de una mujercita’ en mi casa y hasta me recibí de la universidad, no se me otorgan las mismas libertades de las que gozaba mi hermano cuando tenía mi edad. Se me cuida más y se espera de mí que haga lo que una buena mujer debe hacer.


En mi casa se respiran los últimos aires del machismo católico. Ese que la iglesia ha tenido que aceptar poco a poco, desde el mismísimo Vaticano.


Pienso yo… es algo bueno o malo? Si lo vemos del otro lado, el machismo se traduce también a la caballerosidad. Para qué abrirle la puerta o cederle el asiento a una mujer, si ella es igual que el hombre? Por qué no nos abre ella la puerta? Para qué pagarle el boleto del cine? Para qué ir por ella a su casa?

Para qué estarla checando cuando sale? Ella sabe lo que hace, es igual que un “vato”. Para qué procurar que se case con un hombre de bien, que la cuide y le tenga siempre lo mejor? Que se cuide sola! Es más, que a los 18 años se busque su propia casa!


En cierta forma, el machismo no es otra cosa que aceptar la superioridad femenina, ocultándose tras una careta de denigración.

Antes de la “Liberación femenina”, un hombre era capaz de todo por verle los tobillos a una jovencita. Ahora sólo tiene que abrir un explorador de internet, cambiar de canal a la televisión o asistir a X evento para ver a mujeres semidesnudas… o desnudas.


Libres hemos sido siempre, la diferencia es que ahora hemos probado que podemos ser exitosas, poseer cosas que la era cristiana nos prohibió y que no necesitamos hombres para ser felices.


Ahora me pregunto, después de decenas de miles de años, ¿Cuándo vendrá la liberación masculina?



Supongo que cuando a los padres no les de pena arropar al niño en una cobijita rosa :)

8 de enero de 2009

[ ¿Cómo cobrar el tiempo? ]



¿Te ha pedido alguien que le ayudes con una tarea? Separas ese par de horas de tu vida para estudiar con persona X. Se pasan unos minutos entre pláticas, chistes, chismes… y cuando empiezan por fin con el estudio, X no parece entender ni papas.


… O resulta que no le estás ayudando como debías.

… O que X se equivocó y anotó la tarea que no era.

… el libro no aparece.

… o todo salió bien, pero al siguiente día X olvidó el trabajo en su casa.



¿Te ha tocado preparar la cena para más de 4 personas? ¡Y te quieres lucir! … preparar algo que no se hace todos los días o que tú no estás acostumbrado a hacer.


… y resulta que 2 de ellos son alérgicos a los ingredientes que no le puedes quitar (pimienta, cebolla muy picadita, nuez, etc.)

… o que comieron antes de llegar.

… o que llegaron de pasada a comprar comida.

… o se te pasó por 5 minutos el ‘batido’ y ya se echó a perder.

… o que el perro llegó y se lo comió mientras tú contestabas el teléfono.



¿Te ha tocado arreglarte por horas en espera de una salida en especial?


… te dejaste el cabello suelto y empezó a llover o la humedad echó todo a perder.

… te pusiste tacón y resulta que iban a un lugar de piso terroso y empedrado.

… se te antojó usar piel negra y estuvieron bajo el inclemente sol. ¡Vivan las ampollas!

… o abres la puerta y el clima cambia abruptamente, destruyendo todos los planes.

… o que X no pudo salir del trabajo y no pasará por ti.

… o X no tuvo la decencia de notar lo bien que te ves.

… o X (sí, el mismo) te dice que te ves muy bien, pero no deja de ver a todo ejemplar del sexo opuesto que pase a su lado.

… o que Y tenía fiesta ese mismo día y no le puedes fallar.

… o tal vez un dolor estomacal arruina la salida.

… o Z sin querer te vació un refresco de ponche encima.



¿Te ha tocado que te hagan un pedido especial? Digamos, un pastel. Te lo piden con lujo de detalle y hasta te relames los bigotes de sólo pensar lo mucho que les cobrarás. Le dedicas todo tu tiempo a ese pastel y niegas tomar pedidos más pequeños. Pero el día de la entrega…


… nadie viene por él.

… o tu sobrinito llegó y le quitó gran parte del betún con sus dedos pegajosos y sucios.

… o tropezaste con la mesa y le cayó algo pesado encima, destruyendo todo.

… o te dicen que es demasiado caro y no pensaban pagar tanto.



¿Te ha tocado pagar $3’000ºº por impermeabilizar tu casa un hermoso día soleado, y de pronto llega una tormenta destruyendo y manchando todo de aceite? … Y después has tenido que pagar como $15’000ºº para reparar los daños?


¿… comprar un auto nuevo, y que te choquen cuando recién sales de la agencia?

¿… esperar a alguien a quien le vas a hacer un GRAN favor y que ésta persona te deje plantado?

¿… dedicar tu vida a cuidar y amar a alguien y que luego se vaya con la primera persona que le haga ojitos?

¿… perdonar errores de alguien a quien quieres en espera de que cambie, pero pasan los años y no se ven ánimos de mejorar?



Puedes cobrarle a alguien el peinado carísimo que te acaba de deshacer, pero no el tiempo que estuviste en la estética, las quemadas con la secadora y los jalones de cabello.


Puedes cobrarle a tu familia lo que te gastaste preparando esa cena (desde la pierna de cerdo hasta el puñito de pimienta o el gas). Pero no el tiempo que empleaste, el esfuerzo, el cariño y la dedicación.


¿Cómo le cobras a alguien el tiempo que has invertido? Tal vez diciéndole: “Me debes $23ºº de gasolina para venir hasta acá, $10ºº del estacionamiento, $35ºº del café y 48 minutos con 3 segundos de estar escuchando tus problemas, más 25 minutos en lo que me bañé y me arreglé para venir, ¡y creo que son como $11.50 del agua de la regadera!”


¿Cómo traduces segundos a pesos? ¿Se redondea? Ojalá pudiéramos cobrar el tiempo…. Porque a mi me deben Y MUCHO.

Saludos, mis queridos educandos!!! Y Feliz Año a todos ustedes!!!